Octubre se estrenó con un susto en el Vallès Occidental. Un hombre de 51 años sufrió un infarto y paro cardiaco mientras participaba en un entrenamiento del equipo de Veteranos de Balonmano Matadepera.
La ágil intervención del conserje del equipamiento deportivo, que le practicó la reanimación mediante el desfibrilador (DEA) instalado al pabellón, escribió un final feliz al episodio.
El ayuntamiento de Matadepera y BATEGA tienen, desde hace un año y medio, un acuerdo para la cardioprotección de las instalaciones municipales. Un acuerdo que ha escrito el final feliz de un entrenamiento de los veteranos del Balonmano Matadepera.