29/10/2011
La Sociedad Deportiva Fisterra ha puesto en marcha una campaña para intentar conseguir un desfibrilador. La entidad vende pulseras al precio de 3 euros cada una de ellas. La idea es instalar el aparato en el campo Ara Solis. El club asegura que «las nuevas pulseras salvavidas tienen como única misión hacer que la cardioprotección sea algo de todos».
Estos aparatos solo existen en las instalaciones deportivas de Carballo. El Concello decidió adquirirlos después de la muerte de un peruano residente en Malpica cuando nadaba en una de las piscinas de la localidad. También están en el campo de fútbol As Eiroas, que ya ha sido escenario de varios infartos. El último lo sufrió el exdelegado del Bergantiños, Ángel Domar, que logró recuperarse, y fue trasladado en ambulancia al hospital de A Coruña. En lugares públicos han muerto del corazón en la zona ocho personas en solo dos años.
Fuente:
La Voz de Galicia